El anunciado retiro de Venezuela de la Organización de Estados Americanos (OEA) tendrá serias implicaciones para las finanzas nacionales, pues quedará excluida de todos los organismos crediticios vinculados al ente supranacional, además de sentar un precedente negativo al momento de acudir a otras instancias internacionales y países para solicitar apoyo crediticio en medio de la peor crisis económica del último siglo.
“Venezuela quedará excluida de todas las formas de financiamiento de organismos vinculados a la OEA, como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), por ejemplo, y eso no solo dejaría al país sin el auxilio del banco sino que sería muy dañino para su imagen ante otros organismos”, dijo la internacionalista María Teresa Belandria.
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Señaló además que eso sería un aval negativo a la hora de establecer acuerdos con otros países de la región, que en algún momento pudieran ofrecer ayuda financiera o de cooperación a Venezuela.
De hecho, la conflictividad política ya ha tenido sus primeros efectos en este sentido, luego que la CAF decidiera posponer el otorgamiento de un préstamo por 400 millones de dólares solicitado por el gobierno de Maduro.
Belandria recordó que por ejemplo, al haber sido cesada como miembro del Mercosur, Venezuela perdió toda posibilidad de ayuda no solo del bloque sino de los países miembros, algo que exacerbará si se concreta el retiro de la OEA.
Por su parte, el abogado y experto en derechos humanos Carlos Ayala Corao, tras recordar que la salida no será inmediata sino en mínimo dos años, dijo que las implicaciones financieras serán muy serias para un gobierno con graves problemas de flujo de caja.
«Salirse de la OEA implica no poder acudir a todo un sistema económico y de protección que va más allá de los derechos políticos, por ejemplo, para el arbitraje en caso de conflictos comerciales«, dijo Ayala en entrevista radial.
Destacó igualmente que la denuncia (retiro) de Venezuela a la OEA no exime al país de la aplicación de la Carta Democrática, lo que implicaría sanciones aun más serias en el marco financiero.
Asimismo, recordó que el retiro sentaría un precedente muy negativo para el país pues ninguna nación a denunciado nunca a la OEA, ni siquiera Cuba tras su suspensión en los años 60, o Perú luego de la aplicación de Carta Democrática luego del golpe institucional de Alberto Fujimori.
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