Caracas.- El presidente Nicolás Maduro hizo un reconocimiento del mercado negro, dando el anuncio de la paridad bolivar-petro y una aproximación a una unificación con mecanismo de subastas vía BCV. Falta entender como será esto operativamente. Y en un entorno donde el sector público enfrenta un déficit de dólares, indicó el economista Asdrubal Oliveros de Ecoanalítica.
Para el economista el agresivo incremento de salario mínimo tendrá un costo fiscal importante y una carga fuerte sobre el sector privado. Además de impacto en estructura de costos y por ende, precios.
Otro de los elementos de preocupación que resaltó el analista de Ecoanalítica es el anuncio de meta de déficit fiscal cero. «Eso no está mal. Y se anuncian nuevos impuestos, pero también una subida de gastos corrientes (vía salarios y bonos). El tamaño del déficit es de 20 ptos PIB. Eliminarlo de una, luce cuesta arriba».
En linea con lo anterior, lo anunciado permite deducir que el deficit no va a reducirse significativam a pesar de la devaluación, nuevos impuestos y eventual aumento de gasolina. La meta de déficit cero no es creíble y por ende, tampoco la eliminación del financiamiento monetario
«Por ende, en un ambiente de agresiva devaluación y expansión monetaria vía salarios y bonos, se espera una etapa mucho mas agresiva de la hiperinflación. Y más en un contexto donde no es creíble la eliminación del financiamiento monetario. El peor mundo posible», resaltó Oliveros.
Los próximos días serán de mucha confusión tanto para los consumidores como para el sector privado, especialmente el comercial. Es un escenario caótico. Por otro lado, un plan de esta magnitud, con una agresiva restricción externa (sin dólares) en un entorno de sanciones, default y cero apoyo de multilaterales lo hace muy cuesta arriba. Las expectativas negativas de los agentes se imponen.
El analista insistió que el Gobierno sigue insistiendo en el plan 50 que intenta contener el ajuste de precios vía regulación. Un desatino.
«30 dólares es un sueldo miserable, pero bastante menos miserable que $1 o $2. El tema es que lo está haciendo vía decreto y así no sirve de nada. Le mete gasolina a la inflación y el poder adquisitivo se desvanece».
Para finalizar Oliveros indica que «para que la devaluación tenga efecto fiscal debe haber venta neta de dólares al sector privado y eso no ocurre ahora. Y con los impuestos es poco lo que puedes levantar con una caída de base imponible. Y aunque suba la gasolina, no hay manera de levantar casi 20 puntos PIB».