Transportistas de las diversas líneas del Bloque Suroeste de Caracas rechazan el proyecto de reorganización planteado por la Alcaldía del municipio Libertador, con el cual buscan reubicar las unidades en el terminal Río Tuy.
El director de la Unión de Conductores de Antímano, David Bonalde, explicó la reubicación de las líneas dejaría desasistidos «a miles de usuarios que diariamente se movilizan por medio del transporte público».
Explicó que se trata, en su mayoría, líneas de transporte que no cuentan con el permiso de las autoridades para trabajar en las paradas. «Estas rutas se crearon hace seis años como contingencia para movilizar a los caraqueños, ante las fallas del Metro de Caracas», dijo.
Sin embargo, tras más de seis años de actividad en las paradas de la zona rental de Plaza Venezuela, Macarao, Las Adjuntas y Ruiz Pineda, «la alcaldesa, Carmen Meléndez ordenó que las unidades partan desde el terminal Rio Tuy», ubicado debajo de las torres del Centro Simón Bolívar.
Bonalde explicó que la problemática que busca solucionar la alcaldía con esta medida es acabar con las líneas clandestinas que se han creado en diversos sectores de la ciudad.
«Quieren controlar las paradas que ocupan espacios indebidos, el cobro con sobreprecio de los pasajes y la circulación de camionetas del interior del país que han ingresado a Caracas, debido a la escasez de combustible en otros estados».
Infraestructura inadecuada
El dirigente del bloque de transportistas aseguró estar de acuerdo con la alcaldesa sobre la necesidad de reorganizar algunas de las paradas.
No obstante, «esto es algo que no se puede hacer de un día para el otro». Señaló que el terminal Río tuy no cuenta con la infraestructura necesaria para albergar todas las unidades.
«Las medidas de las entradas no son las adecuadas para los autobuses, son muy bajas. Algunos vehículos han sufrido daños en sus techos», aseveró.
Además, al se una estación subterránea con espacios demarcados para el funcionamiento de más de 32 líneas de transporte, «es casi imposible trasladar a todas las unidades al terminal».
Puntualizó que, «desde hace 15 días, cuando se recibió el primer llamado de las autoridades, hay entre 60 y 70 camionetas de las rutas de Caricuao y Las Adjuntas operativas desde el terminal Río Tuy».
Usuarios se oponen
Las paradas que se ubicaban en las adyacencias de la estación del metro de Zona Rental, con destino Las Adjuntas y Caricuao fueron reubicadas desde hace más de una semana.
Debido a esto, usuarios han expresado su inconformidad y manifestaron que «necesitamos el transporte público para poder movernos, porque los sistemas de transporte del Estado no funcionan».
Explicaron que, con la nueva ubicación de las líneas en el terminal Río Tuy, «debemos pagar más del doble del pasaje para llegar a nuestro destino».
Héctor Arrieche, detalló que «desde Ruiz Pineda hasta Plaza Venezuela, pago normalmente un pasaje de 2,5 bolívares».
En cambio, «si mueven las camionetas al terminal, tendré que pagar tres, de ida y vuelta, desde Ruiz Pineda a Río Tuy y luego hasta Plaza Venezuela».
En este sentido, los choferes de Ruiz Pineda recolectaron firmas para que se les permita circular en las rutas con destino Plaza Venezuela y Chacao.
La petición se entregará al director del Instituto Autónomo de Trasnporte, Miguel Gallegos, dijeron los transportistas.
Denuncian detenciones arbitrarias
El fiscal de la parada de Los Telares en Ruiz Pineda, Jean Carlos Ortega, informó que los choferes que circulan en rutas de Chacao han recibido amenazas por parte de los cuerpos policiales.
Además, en algunos casos «los choferes han sido detenidos, les quitan las placas de las unidades y los amenazan con llevarlos ante la Fiscalía», señaló.
Explicó que la situación se debe a que «las unidades no cuentan con un permiso formal para transitar en ese municipio».
Sin embargo, «nosotros nos encargamos de trasladar al inmenso volumen de usuarios que existe en ese sector, no es ningún crimen, atendemos una necesidad».
Aseguró que «diariamente más de 3.000 usuarios se movilizan hacia Chacao desde Ruiz Pineda».
Por lo cual, el cierre de la ruta «dejaría varadas a estas personas, que huyen de transportes como el metro y el metrobús, porque no funcionan como deberían».
Explicó que más de 150 personas, entre choferes y colectores, corren el riesgo de quedarse sin trabajo.
«En esa ruta se movilizan más de 40 unidades diariamente. Es el sustento de los transportistas y la solución para los usuarios», expresó.
Texto e imagen de 2001
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