Los mercados bursátiles mundiales tocaban máximos récord el lunes, en el primer día de operaciones del año, debido a que los inversores esperaban que la distribución de vacunas finalmente impulse a una economía global diezmada por la pandemia del COVID-19.
El yuan trepaba casi un 1% frente al dólar, mientras que el billete verde se desplomaba a sus niveles más bajos frente a una cesta de divisas desde abril de 2018. El bitcoin cotizaba sobre los 32.000 dólares, gracias a una remontada de un 800% desde mediados de marzo.
Las acciones europeas abrieron al alza, el FTSE 100 británico ganaba un 1,75%, el DAX alemán sumaba un 1,1%, el IBEX español subía un 1,3% y el FTSE MIB italiano avanzaba un 0,7%.
El índice mundial MSCI, que sigue a los mercados de 49 países, tocó un máximo récord y ganaba casi un 0,5% el día después del inicio de las operaciones en Londres.
Los mercados bursátiles de Asia también subieron, aunque el índice Nikkei 225 japonés borró sus alzas iniciales y cerró con una baja de un 0,4% después de que el primer ministro nipón, Yoshihide Suga, confirmó que el gobierno estudia declarar el estado de emergencia para Tokio y tres prefecturas vecinas ante la propagación del coronavirus.
Las minutas de la reunión de diciembre de la Reserva Federal se conocerán el miércoles y deberían ofrecer más detalles sobre las discusiones en torno a cómo hacer más explícita la orientación de su política futura y la posibilidad de un mayor aumento en la compra de activos este año.
El calendario de datos incluye una serie de sondeos al sector manufacturero en el mundo, que mostrarán cómo la industria está lidiando con la propagación del coronavirus, y los sondeos de ISM de los sectores fabril y de servicios de Estados Unidos.
La actividad fabril china continuó acelerándose en diciembre, aunque el PMI no cumplió con las previsiones y se ubicó en 53,0, mientras que la producción manufacturera de Japón se estabilizó por primera vez en dos años en diciembre.
El viernes se conocerá el reporte de nóminas de diciembre en Estados Unidos, donde la mediana de las previsiones apunta a un modesto aumento de 100.000 empleos.
En los mercados de monedas, el euro volvía a subir a 1,2281 dólares, después de que sufrió una toma de ganancias a fines de la semana pasada cuando alcanzó su máximo desde comienzos de 2018 a 1,2309 dólares. Ganó casi un 9% en 2020.
El dólar cayó a 102,80 yenes. La libra esterlina subía a 1,3690 dólares, niveles vistos por última vez a mediados de 2018.
La caída del dólar ha brindado respaldo al oro, que subía un 1,3% a 1.931 dólares la onza.
Los precios del petróleo extendían sus avances, luego de un par de meses de robustas ganancias, y el Brent superaba los 53 dólares por barril. El crudo en Estados Unidos ganaba un 2% a 49,52 dólares por barril.
Tomado de Reuters.
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