Durante el año 2023, Estados Unidos mantuvo diálogos directos con Venezuela que culminaron en la firma de un acuerdo en Barbados, donde se discutió el alivio de las sanciones al país sudamericano, entre otros temas.
Sin embargo, recientes acciones del gobierno venezolano, como la firma de un acuerdo electoral con múltiples fechas para las elecciones presidenciales, han sido consideradas por algunas partes como una violación de los compromisos adquiridos en Barbados.
De acuerdo con informes de Bloomberg, esta situación plantea un desafío a la diplomacia entre ambos países, ya que el presidente Nicolás Maduro podría no estar cumpliendo con los términos para unas elecciones más libres y justas en Venezuela, como se acordó previamente.
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A pesar de estas tensiones, el gobierno del presidente Joe Biden podría mostrar cierta reticencia a reimponer sanciones a Venezuela. Esto se debe a que la presencia del petróleo venezolano en el mercado podría contribuir a mantener los precios del crudo bajos a nivel mundial, así como también el costo de la gasolina en Estados Unidos, lo cual es importante en el contexto de la necesidad de contener la migración.
Para Biden, detener la ola migratoria es una prioridad, y una economía más fuerte en Venezuela podría reducir la cantidad de ciudadanos que abandonan el país en busca de mejores oportunidades.
Sin embargo, la situación política en Venezuela sigue siendo motivo de preocupación para los inversores, como lo demuestra el reciente descenso en las ganancias de los bonos venezolanos, que se vieron afectados por el ajuste de los títulos en índices seguidos por los mercados emergentes, así como por las incertidumbres políticas en el país.
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