Este lunes, la Comisión Nacional de Primaria (CNP) declinó la oferta de asistencia técnica del Consejo Nacional Electoral (CNE) para la organización y ejecución de las elecciones internas de la oposición. A las pocas horas, el ente público comicial emitió un comunicado que, sin aludir directamente a la decisión de la comisión, indica descontento con la misma.
En resumen, el CNE no solo insiste en que está presto a brindar el apoyo técnico. Además se atribuyó exclusividad en la gestión de elecciones de todo tipo den el país.
El mensaje pudiera interpretarse como una advertencia de que la elite gobernante, a la que el CNE está subordinado, no permitirá que las primarias de llevan a cabo sin la orientación del consejo.
Exclusividad selectiva
El documento del CNE produjo asombro y estupor en la opinión pública, manifestados en comentarios al respecto en redes sociales. Porque en Venezuela se hacen distintos tipos de elecciones sin que el CNE intervenga en absoluto. No se trata solo de entidades pequeñas. Este mismo año, la Universidad Central de Venezuela llevó a cabo comicios sin el CNE. No hubo ninguna reacción adversa por parte del CNE o alguna otra institución del Estado.
¿Por qué entonces es justo ahora que el ente público electoral reclama para sí esta exclusividad? Probablemente porque las elecciones de la UCV y otras no eran de mayor importancia para la elite gobernante, mientras que la primaria opositora sí lo es.
Después de todo, si la elección interna es un éxito, ese éxito será para la oposición. Sobre todo en cuanto al número de votantes. Si son muchos, ello delataría que la intención de voto por la oposición en los venideros comicios presidenciales es alta. Además, si los sondeos están en lo correcto, quien ganaría la primaria es María Corina Machado, líder del partido Vente Venezuela y una de las adversarias más inflexibles del gobierno.
En tal sentido son bastante notables los resultados de la última encuesta de la firma Poder y Estrategia. 32% de los consultados manifestó que «definitivamente sí» sufragará en la primaria. Bastante alto para unos comicios internos. Pero si el CNE gestionara la elección, ese porcentaje se desploma a 9,5%.
Alborotando el avispero
Otro objetivo de la elite gobernante, mediante la advertencia del Consejo Nacional Electoral, pudiera ser profundizar divisiones dentro de la oposición, en torno a aquellas facciones que desde un principio se inclinaron por la participación del CNE y los que la rechazaron.
Como se explicó antes por esta vía, si el CNE hubiera puesto como requisito para su asesoría el veto a candidatos inhabilitados, los detractores de su papel en la primaria habrían tenido un buen argumento ante la base opositora para desconocer la legitimidad del proceso.
Pero finalmente el CNE no hizo tales requerimientos. En vez de eso, puso como condición el uso de su sistema automatizado de votación y posponer la primaria un mes. Dado que estas razones para rechazar la asistencia técnica tal vez no sean tan convincentes, los partidos que favorecieron la participación del CNE tal vez presionen a la CNP para que dé un giro de 180 grados.
Faltan menos de tres semanas para la primaria. Muy pronto se verá el desenlace.