Deyna Castellanos busca mediación ante la tensa situación dentro de la selección femenina de fútbol

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Cortesía

A pesar de los triunfos recientes de la selección femenina de fútbol, en los últimos días se han difundido comunicados de miembros de la selección que han revelado situaciones irregulares.

La capitana de la selección, Deyna Castellanos, se pronunció a través de las redes sociales para solicitar a la organización los espacios necesarios que permitan una comunicación efectiva entre las partes involucradas, con el objetivo de alcanzar la mejor solución.

La controversia se originó cuando la mediocampista Sonia O’Neill emitió un comunicado en su cuenta de Instagram, expresando su malestar hacia la entrenadora de la selección, Pamela Conti. Este comunicado recibió el respaldo posterior de las jugadoras Kika Moreno y Yerliane Moreno, quienes también compartieron problemas similares relacionados con la entrenadora italiana.

Las jugadoras denunciaron que Conti había creado un ambiente hostil y que había discriminado a algunas de las integrantes del equipo.

En el comunicado, O’Neill explicó que ni ella ni sus compañeras estuvieron presentes en el amistoso contra Uruguay debido a lo que calificó como una «falta de comunicación». Además, destacó que su relación con la entrenadora había cambiado y que tenía la impresión de que Conti intentaba marginarla del equipo, cuestión que había comentado a otras jugadoras.

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«No estoy lesionada ni enferma ni he cometido ningún error grave. Durante nuestro tiempo libre, solicité permiso al coordinador para ir al banco que está al lado de nuestro hotel, y debido a la falta de comunicación, la entrenadora (Pamela Conti) supuso que no teníamos permiso. Como resultado, algunas de nosotras no estuvimos en la cancha contra Uruguay. Después del partido, la entrenadora mentirá sobre esto y utilizará esa mentira como una excusa para no convocarme más a la selección. Se lo comentó a algunas jugadoras, pero nunca me lo dijo a mí directamente. Esto es algo que ella ha querido hacer durante mucho tiempo«, declaró O’Neill.

Deyna Castellanos, por su parte, abordó las declaraciones de la mediocampista de 29 años durante una conferencia de prensa.

«Esto es lo único que vamos a discutir sobre el tema. No estoy al tanto de lo que Sonia pudo haber dicho o no. Ella es una adulta y si tomó la decisión de emitir esas declaraciones, habrá que analizar lo sucedido. Estoy orgullosa del equipo que tenemos. Aunque seamos 23 jugadoras, en este momento somos 22«, afirmó Castellanos.

Finalmente, la entrenadora italiana, Pamela Conti, expresó: «En un vestuario, existen normas y reglas que deben respetarse. Quienes no las respeten deben afrontar las consecuencias. No voy a comentar más sobre este tema porque no es de mi competencia. Sonia O’Neill sabrá lo que escribió«.

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