Apple, el gigante tecnológico de Estados Unidos, se encuentra actualmente enfrentando una demanda en el Reino Unido por 785 millones de libras esterlinas (equivalentes a 1.012 millones de dólares). La demanda fue presentada el martes y acusa a la compañía de abusar de su posición dominante al establecer tarifas para los desarrolladores que utilizan su plataforma de aplicaciones.
El profesor de política de la competencia en la Universidad de East Anglia, Sean Ennis, ha tomado la iniciativa y presentado la acción en nombre de más de 1.500 desarrolladores británicos ante el Tribunal de Apelación de Competencia.
En su comunicado, el académico argumenta que la «comisión» del 30% que cobra Apple por las ventas en la App Store representa una tasa anticompetitiva dentro de la industria tecnológica británica, y que los demandantes tienen derecho a recibir hasta 785 millones de libras en compensación.
Esta no es la primera vez que Apple es objeto de críticas por parte de autoridades antimonopolio en diferentes países debido a esta comisión que alcanza hasta el 30% en todas las compras realizadas a través de la App Store, que es una plataforma fundamental para los creadores de aplicaciones.
El regulador de la competencia en el Reino Unido inició una investigación sobre las prácticas de Apple en 2021 en relación a este tema específico.
Por su parte, Apple ha respondido alegando que los desarrolladores de aplicaciones tienen la opción de ofrecer sus productos directamente a los usuarios a través de cualquier navegador de internet, sin necesidad de utilizar su plataforma.
También destacan que la mayoría de los creadores no pagan comisiones a Apple y que, de hecho, la mayoría de las aplicaciones están sujetas a una comisión del 15% gracias a las excepciones que se aplican a las pequeñas empresas.
EFE
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