A lo largo de los últimos meses, el precio de los productos de charcutería han sufrido un continuo incremento en su valor que, sumado al depreciado poder adquisitivo del venezolano, los convierten en productos inalcanzables.
En un recorrido hecho por Descifrado, pudimos ver que muchos de los precios están en dólares. Un ejemplo de ello es el queso amarillo, que se ubica entre los $6,30 y $14.
Por su parte, el jamón de pierna ronda desde los $6 a $11. Asimismo, la pechuga de pavo cuesta por los mínimo $5,50.
El kilo del queso mozarella más económico se puede adquirir en $6,20, mientras que el queso tipo paisa no baja de los $6.
Cabe destacar que el protagonista en las mesas de los venezolanos a lo largo de los últimos meses, el queso blanco, pero éste también se ha convertido en un lujo al llevar a conseguirse en los $5,70
Es importante señalar que el salario mínimo en el país es de tan solo BS. 1.800.000, tras un reciente incremento del mismo. Dicha cifra es irrisoria para comprar cualquier producto de charcutería.
Cabe destacar que muchos de los precios en las charcuterías se manejan en miles, lo que refleja la simplicidad que se ha asumido para hablar de los montos, que por la creciente hiperinflación resultan cada vez más inmanejables a nivel contable. Ésto sin duda es reflejo de tan augurada reconversión que se viene rumoreando en los últimos meses.
Pero más allá, en los comercios venezolanos también se puede vivir de primera mano la dolarización transaccional, dado que no son pocos los establecimientos que manejan sus precios en la divisa estadounidense y por ende los pagos en bolívares los calculan al cambio del día según el BCV o el paralelo.
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