Los fuertes combates registrados en las últimas horas entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el grupo criminal Los Rastrojos ha provocado el desplazamiento «masivo» de habitantes de la región. Podría haber entre 300 y 500 desplazados, según las fuentes, todo ello en medio del tercer día de paro armado convocado por el ELN.
«Se está haciendo la caracterización de las personas desplazadas. Estamos apoyando el tema humanitario para dar una ayuda oportuna por parte de la gobernación, alcaldía y derechos humanos», ha explicado el comandante de la policía de Cúcuta, coronel José Palomino, en declaraciones recogidas por Caracol Radio.
«Se presentaron enfrentamientos entre grupos al margen de la ley en el lado venezolano, integrantes del ELN y Los Rastrojos, según informa las personas que han cruzado la frontera. Hasta Puerto Santander han llegado tres personas heridas», ha apuntado Palomino.
La alcaldesa de Puerto Santander, María Virginia Torres, ha explicado a Caracol Radio que «en este momento está cerrada la frontera por orden de las autoridades venezolanas por la alteración del orden público». «Tenemos desplazamientos hacia Puerto Santander hemos logrado atender más de 200 personas, aunque creemos que hay 500 personas desplazadas, algunos se encuentran en viviendas de familiares y amigos», ha apuntado Torres.
El coordinador de la Mesa de Víctimas de Cúcuta, Milton Hostia, ha declarado a Caracol Radio que «es lamentable la situación que se está viviendo en Puerto Santander debido a los enfrentamientos». «Más de 300 personas se vieron obligadas a salir de sus viviendas: niños, personas discapacitadas, mujeres embarazadas y adultos mayores. El municipio no cuenta con un albergue para atender a las personas desplazadas para atender sus necesidades», ha apuntado.
«Como defensores de derechos humanos, rechazamos todos estos hechos presentados en Boca de Grita, Puerto Santander y la zona de frontera donde los grupos armados están atacando a la población civil, pedimos dejarlos fuera del conflicto», ha añadido.
UN CABO MUERTO
Por su parte, el comandante del Ejército de Tierra, Eduardo Zapateiro, ha informado de la muerte de un militar en el marco del paro armado convocado por el ELN. El fallecido es el cabo primero Norbey Felipe Palacios. «Dolor de patria. Dolor institucional. Dolor de compañeros. Un valioso héroe que entregó la vida por Colombia. Dios Todopoderoso recibe a nuestro cabo primero Norbey Felipe Palacios, asesinado cuando defendía la nación de las amenaza del ELN», ha publicado Zapateiro en Twitter.
El militar fallecido murió en enfrentamientos entre el Ejército y el ELN en una zona rural del municipio de Convención, en Norte de Santander. Palacios resultó herido y falleció cuando era trasladado a un centro sanitario.
Integrantes del ELN lanzaron también dos granadas contra la estación de policía del municipio de Curumaní, en el departamento norteño del Cesar, e hirieron a dos personas.
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