Miles de trabajadores de Pdvsa han huido de la estatal petrolera bajo la mirada de su nuevo presidente militar, Manuel Quevedo. Según reseña Reuters, el también ministro de Petróleo y Minería «ha alienado los escalafones superiores de la compañía y a su personal, de acuerdo con líderes sindicales, media docena de empleados actuales, una docena de ex empleados y media docena de ejecutivos de empresas extranjeras en Venezuela».
«Algunas oficinas de Pdvsa actualmente tienen colas con docenas de trabajadores esperando para renunciar. En al menos un despacho administrativo en Zulia, personal de recursos humanos se niega a procesar las solicitudes y colocó un anuncio que dice ‘No se aceptan renuncias’, según expresó un trabajador petrolero», se lee en el texto de la agencia.
Las estadísticas oficiales de mano de obra se han vuelto un secreto rigurosamente guardado. Sin embargo, fuentes informaron que miles de empleados han renunciado en lo que va de año, lo que agrava un problema ya complicado el año pasado.
«Unos 25.000 trabajadores renunciaron entre principios de enero de 2017 y finales de enero de 2018», expresó el presidente de la Federación Única de Trabajadores Petroleros de Venezuela, Iván Freites, citando datos internos. La cifra se resta a un total de 146.000 empleados en 2016, último número oficial conocido.
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