Uber deberá pagar el salario mínimo y vacaciones a sus conductores en Reino Unido, según el fallo en apelación emitido este viernes por un tribunal laboral de Londres, donde la compañía estadounidense está también amenazada de perder su licencia.
La empresa, que afirma tener cerca de 50.000 conductores en Reino Unido y 3,5 millones de clientes en Londres, recurría un fallo judicial de 2016 que estableció que los conductores que utilizaban la aplicación tenían derecho al sueldo horario mínimo de 7,50 libras (9,8 dólares, 8,50 euros) y a vacaciones pagadas.
Hasta ahora, los conductores son pagados por trayecto y la empresa subraya que son trabajadores independientes, que eligen sus horarios y lugares de trabajo.
El tribunal laboral de Londres decidió así que la empresa Uber tenía que considerar empleados a sus conductores y pagarles el salario mínimo.
«Uber no puede seguir ignorando la ley de forma impune, y privar a la gente de sus derechos a un salario mínimo», comentó el otro demandante, James Farrar, en un comunicado.
Los demandantes tienen el respaldo del sindicato de trabajadores independientes de Gran Bretaña (IWGB).