El petróleo subió el jueves en Nueva York acompañando el alza de los precios de la gasolina, por las dificultades de refinación de crudo causadas por la tormenta Harvey en Estados Unidos.
El barril de «light sweet crude» (WTI) para entrega en octubre subió 1,27 dólares a 47,23 en el New York Mercantile Exchange (Nymex).
Entre tanto, el barril de crudo Brent del mar del Norte, para entrega en octubre, en el último día de cotización de este contrato, se vendía a 52,32 dólares en el Intercontinental Exchange (ICE) de Londres, o sea, con un aumento de 1,46 dólares respecto al cierre del miércoles.
El petróleo se replegó desde la llegada de Harvey debido a que numerosas refinerías de Texas dejaron de operar y, en consecuencia, mermó la demanda de crudo.
El galón de gasolina (3,8 litros) negociado en Nueva York subió este jueves 13,5% a 2,1399 dólares.
La suspensión de la actividad de refinerías y de los oleoductos que abastecen desde Texas al norte y este del país, hizo mermar la disponibilidad de gasolina y «desató una reacción muy fuerte en los mercados de productos petroleros», dijo John Kilduff de Again Capital.