El petróleo cerró en leve baja este jueves en Nueva York y Londres, resistiendo a una recaída gracias a comentarios hecho por de Arabia Saudita considerados alentadores.
El barril de «light sweet crude» (WTI) perdió 11 centavos a 48,75 dólares en los contratos para entrega en abril en el New York Mercantile Exchange.
En Londres, el barril de Brent para entrega en mayo valía 51,72 dólares, una bajada de nueve centavos respecto al miércoles.
La caída de los precios disminuyó «cuando recibieron el apoyo de declaraciones del ministro saudí de Energía, que dijo estar listo para actuar si las reservas eran más elevadas de lo normal», explicó John Kilduff de Again Capital.
«Queremos avisar que estamos listos para hacer todo lo que se necesite para que el sector vuelva a estar en una situación sana», declaró Khalid al Faleh en una entrevista a Bloomberg el jueves.
En momentos en que las reservas estadounidenses de bruto están en niveles récords pese a la baja muy leve anunciada el miércoles, estas declaraciones dejan la puerta abierta a una prolongación de los acuerdos de reducción de la producción, cuyo principal artesano fue Arabia Saudita.
Estos acuerdos, en el seno de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), entraron en vigencia el 1 de enero por un período inicial de seis meses.
Después de haber soportado la mayor parte del esfuerzo de las extracciones, Arabia Saudita parecía mostrar señales de impaciencia, según los analistas, y declaró haber aumentado levemente su producción en febrero.
Salvo un rebote el miércoles, el mercado está a la baja desde hace más de una semana: los inversores se preocupan por la falta de consecuencias de los recortes realizados por la OPEP, las reservas están elevadas en Estados Unidos y hay un contexto de aumento de la producción estadounidense impulsada por las extracciones del petróleo de esquisto.
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